En un mundo donde la sostenibilidad y la innovación son fundamentales, los biorreactores emergen como herramientas clave para la industria alimentaria. Hace algunos meses llegó a CeTA el biorreactor BLBIO-100SJA, una herramienta clave para transformar ideas innovadoras en productos alimentarios sostenibles y de alta calidad, incluyendo proteínas recombinantes, colorantes naturales e ingredientes funcionales.
Este “laboratorio viviente” optimiza el uso de microorganismos y enzimas, con un control preciso de variables como temperatura, pH y oxígeno, asegurando una producción eficiente y de alta calidad. Destaca por su versatilidad y facilidad de uso, además de estar diseñado para operar en volúmenes flexibles entre 10 y 100 litros, ideal para pruebas piloto y escalas semi industriales.
Además, incorpora un sistema de limpieza y esterilización automáticos, sensores de alta precisión, y una interfaz intuitiva con pantalla táctil de 10 pulgadas, ofreciendo control total en tiempo real. Estas características no sólo reducen costos operativos, sino que también democratizan el acceso a tecnologías avanzadas, haciéndolas accesibles a empresas de todos los tamaños.
En Chile, la falta de infraestructura adecuada para escalar bioprocesos ha limitado significativamente la capacidad del país para producir proteínas recombinantes de alto valor comercial, particularmente en la industria alimentaria. Por ello, queremos una alternativa de pilotaje en nuestras instalaciones con la puesta en marcha de esta nueva línea de negocio asociada a biorreactores.
“En CeTA ponemos nuestra tecnología de última generación al servicio de emprendedores y empresas para transformar ideas en productos innovadores listos para el mercado. Nuestro enfoque personalizado no sólo potencia el desarrollo de ingredientes funcionales y sabores naturales, sino que también impulsa la competitividad, marcando un antes y un después en la innovación alimentaria“, afirma Jean Paul Veas, Director Ejecutivo de CeTA.
Producción con liofilización al alcance de todos
Con el apoyo del Proyecto “Desarrolla Inversión Provincia de Concepción”, respaldado por el Comité Corfo Biobío, logramos llevar nuevo equipamiento al recién inaugurado Centro de Innovación de CeTA Sur, ubicado en Coronel.
Hoy podemos proporcionar apoyo a emprendedores y empresas de la zona sur del país en la creación de alimentos premium y saludables, ya que contamos con el equipo de liofilización FreeZone® 18L -50°C.
La liofilización es una técnica que elimina la humedad de los alimentos mediante sublimación, preservando su estructura, sabor y nutrientes, sin necesidad de conservantes ni altas temperaturas. Ideal para productos naturales y de exportación, este método garantiza calidad y larga vida útil en cada desarrollo.
El proceso de liofilización comienza con la congelación del producto a bajas temperaturas (-50 °C), seguida de la aplicación de un vacío extremo que transforma el hielo directamente en vapor. Finalmente, se realiza un secado que elimina el agua residual, resultando en un producto ligero, estable y listo para el mercado. Entre sus ventajas, este método conserva de forma óptima el color, sabor y nutrientes de los alimentos, convirtiéndose en la solución preferida para quienes buscan diferenciarse en el competitivo mercado alimentario.
Matías Campos, Jefe de Negocios de CeTA destaca: “Ponemos a disposición un equipo que permitirá aterrizar mejor las ventajas de esta tecnología, especialmente en el apartado organoléptico de sus productos versus los costos asociados a ella”.
En CeTA, combinamos el FreeZone® 18L -50°C con la experiencia de nuestro equipo técnico para ofrecer pruebas piloto personalizadas, producción escalable y asesoría en todas las etapas del proceso. Nuestra infraestructura está diseñada para transformar ideas en productos innovadores, adaptados a las necesidades de los mercados más exigentes, contribuyendo al desarrollo de alimentos funcionales y sostenibles.