El histórico consorcio de instituciones reunido en el Centro Tecnológico para la Innovación Alimentaria (CeTA) hizo posible la puesta en marcha del Nodo Sur en la ciudad de Temuco.
La iniciativa apoyada por Corfo, será clave para pymes y emprendedores de la zona que requieran desarrollar productos innovadores, ingredientes saludables, alimentos procesados y packaging.
En el Instituto de Agroindustria de la Universidad de La Frontera se inauguró la primera planta del consorcio CeTA, destinada a atender las necesidades de pilotaje de pymes y emprendedores ubicados en el sur del país, cuya producción tenga foco en productos y materias primas propias de la zona.
La actividad contó con la participación de Sebastián Sichel, vicepresidente ejecutivo de Corfo; Jean Paul Veas, director ejecutivo de CeTA; del Dr. Renato Hunter, vicerrector de Investigación y Postgrado de la Universidad de la Frontera, y del presidente del directorio de la Corporación CeTA, Andrés Barros.
“El desafío para la agroindustria y la industria alimentaria es agregar valor. Esto posiciona al CeTA en el centro de la estrategia de desarrollo futuro de esta industria. Desde Corfo, queremos posicionarlo como punto de encuentro, donde las empresas obtengan solución a sus requerimientos de innovación, y contribuir a que Chile se transforme en una de las principales potencias mundiales en exportación de alimentos saludables y de calidad al 2030. Buscamos ampliar la base de nuestra economía creando valor, multiplicando actores, y acelerando el proceso de éxito de sus negocios”, explica Sebastián Sichel, vicepresidente ejecutivo de Corfo.
Este Centro, de 400 metros cuadrados, alberga un complejo sistema de procesamiento alimentario y packaging con tecnología de punta, que permitirá ofrecer servicios como desarrollo e innovación de envases y embalajes; alternativas de deshidratado; línea de jugos y extracción de aceites; prototipaje y pilotaje cervecero, entre otros.
“Nos propusimos generar múltiples prestaciones de servicios para esta planta, ubicada en una zona estratégica como la novena región, lo que nos permitirá prototipar, pilotear y escalar las innovaciones en alimentos de regiones que tienen un enorme potencial productivo, con materias primas agrícolas y subproductos a los cuales se les puede dar un valor agregado”, señala Jean Paul Veas, director ejecutivo de CeTA.
“Sin duda, la operación del CeTA permitirá a la industria dar un paso significativo en términos de capacidades de pilotaje y desarrollo tecnológico para cumplir con las metas de aumentar, diversificar y sofisticar nuestras exportaciones agroalimentarias”, destacó Graciela Urrutia, gerente del Programa Estratégico Transforma Alimentos.
El vicerrector de Investigación y Postgrado de la UFRO, Dr. Renato Hunter, afirmó que se trata de un proyecto de considerable implicancia para la universidad. “Esta iniciativa tiene un perfil pre-comercial, donde las empresas tendrán capacidad tecnológica para testear sus productos antes de ser lanzados al mercado. Y esto, a su vez, nos abrirá espacio a la innovación y al desarrollo tecnológico, al agregar valor a nuevos productos que podrán ofrecer diferencias sustanciales frente a sus competidores más cercanos”, valoró.